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¿Cómo sientes tu piel?
Piel Normal
Una piel en la que la producción de grasa y la hidratación están en equilibrio y la piel no es ni demasiado grasa ni demasiado seca.
La zona T (la frente, la barbilla y la nariz) puede ser un poco grasa. Y no es propensa a la sensibilidad.
- Poros finos.
- Buena circulación sanguínea.
- Textura aterciopelada, suave y lisa.
- Transparencia uniforme de color rosado, fresco.
- Ausencia de impurezas.
Piel Seca
Un tipo de piel que produce menos sebo que la piel normal. Puede presentarse con rugosidad, descamación y pequeñas grietas al enrojecimiento, la inflamación y la rigidez constante.
La deshidratación aparece en las mejillas y alrededor de los ojos. Esto depende de la aportación de agua al interior de las capas más profundas de la piel y depende también de la transpiración.
Piel Grasa
Un tipo de piel que tiene una elevada producción de sebo. La piel grasa tiene brillo y poros visibles. Es propensa a acné.
- Poros agrandados, claramente visibles.
- Brillantez.
- Piel engrosada y pálida: los vasos sanguíneos pueden no ser visibles.
Piel Mixta
La piel mixta es, como su nombre indica, una piel que consta de una mezcla de tipos de piel. Los tipos de piel varían, entre la zona T y las mejillas con piel mixta.
- Zona T grasa (frente, mentón y nariz).
- Poros agrandados en esta zona, tal vez con algunas impurezas.
- Mejillas entre normales y secas.
Piel Sensible
Picazón, sensación de calor, tirantez, sensación de malestar, enrojecimiento difuso o localizado, son síntomas que caracterizan la piel sensible.
- Rojeces.
- Picazón.
- Sensación de opresión y calor.
- Sequedad.
- Descamación.
- Alergias.